En 2002, Microsoft compró Rare por 375 millones de dólares, asegurando su exclusividad para la plataforma Xbox. Sin embargo, la transición fue difícil. Algunos títulos como Kameo: Elements of Power y Perfect Dark Zero recibieron críticas mixtas.
Rare encontró su identidad nuevamente con Viva Piñata (2006) y posteriormente con Sea of Thieves (2018), su primer éxito en la era moderna. Actualmente, Rare sigue innovando con títulos como Everwild, un misterioso juego en desarrollo.